Director, editor, redactor

Estudié en el Colegio San Ignacio y posteriormente me gradué en la Universidad Alberto Hurtado. Realicé cursos de televisión y expresión corporal en la Universidad Católica de Río de Janeiro en Brasil.

3/24/2007

Digan lo que digan...

Hoy juega Chile contra Brasil. Ayer me paseé por las calles de Río de Janeiro con la polera de la selección. Sí, todos sabían que era extranjero… pero me dio lo mismo. Siempre he sentido un gran apego por ella; más bien por Chile. Será que siempre tuve el sueño de jugar por nuestro país vistiendo “la roja de todos”.

Soy patriota. Y mucho. Con orgullo pululo por las calles extranjeras con un escudo en mi mochila que resalta por una inmensa estrella blanca en medio de un fondo rojiazul. Debo reconocer que muchas veces se me han puesto los pelos de punta al ver aquella hermosa segunda bandera más bonita del planeta en la cumbre de alguna montaña inalcanzable para la mayoría de los mortales. Como también he bajado la cabeza al ser reconocido como “los lanzas europeos”. Es que para mí, Chile es pasión.

Debo ser de los pocos seguidores de “Chile” en su máximo esplendor. Me acuerdo, siendo muy pequeño, haberme despertado todas las madrugadas para ver una joven sub 17, con Rozental y Neira a la cabeza. O haber sufrido con lágrimas en los ojos las medallas olímpicas. Y para las eliminatorias del mundial 2002 –la peor eliminatoria de Chile a lo largo de su historia- fui a todos los partidos jugados en Chile al estadio; y en ningún momento dejé de alentar… ni si quiera cuando perdíamos 1 - 3 contra Venezuela y todo el público comenzó a pifiar y a cantar “ole” contra nuestro país… incluso los mismos chilenos.

Chile es pasión. El fútbol es pasión. Hoy, a las 11 de la mañana, los transantiago, cambios de gabinete, marlenes olivaríes… todos los problemas quedaran en el olvido por 90 minutos; donde un país se une al son de un “puro chile”; esperando que 11 guerreros mojen la camiseta con garra y pasión… la misma que siento yo cada día que recorro las calles de Río, con mi querido escudo Rojiazul en la espalda.

Yo creo en la roja… digan lo que digan.
¡Viva Chile mierda!
Hoy ganamos 3 -1... digan lo que digan.

Suerte a todos…

6 comentarios:

Anónimo dijo...

me emocionó ver esa foto.
se te extraña mucho tatan, un abrazo gigante!.
tu primo :).

Unknown dijo...

hola!!! es bacan sentir eso ...da lo mismo donde estes pero ser chileno es lo mejor...aunque no sepan donde queda...la lata que que muchas veces tenemos que estar lejos para cachar lo que somos y lo que tenemos...TE apoyo MASLINDO
besos JESU

Anónimo dijo...

Te apoyo, pero quiero separar dos cosas muy distintas: ser chileno de corazón no significa apoyar irrestrictamente a un grupo de jugadores no está jugando bien. Al final, la selección es un equipo de fútbol, y como tal tiene el deber de lograr (buenos) resultados, y no lo está haciendo.

Es más, creo que una gran muestra de chilenidad es criticar y exigir a la selección cuando no está haciendo bien las cosas. Lo contrario sería falta de preocupación, muestra de - al menos en el área deportiva - falta de chilenismo.

Ahora desde el corazón... me enojo y los mando a la mierda cuando pierden, pero siempre soy el primero en armar el asado para los partidos de Chile. Porque es todo un evento. Porque me encanta. Porque soy chileno!

Saludos!

MGM

Cristián Donoso Krauss dijo...

Sí Martín, en parte tienes razón. Pero a lo que a mi respecta, ser chileno es querer y aprovechar "lo nuestro"; es creer que poco y nada es imposible para nosotros; es tambiñen criticar pero tener tambíen trabajar por ello... es " tener fe en que lo vamos a lograr"... incluso ganarle al mejor equipo de fútbol del mundo.
Sigo creyendo en la roja, y cada día me siento más chileno... sobre todo aquí, después de escuchar a mi amigo Junior: "Chile es una mierda... una mala broma para el fútbol".

tata! dijo...

Yo fui al estadio, me dio pena como ver a 11 webones que no son capaces de correr a un pelota, de mojar la camiseta ni de dejar todo en la cancha, una seleccion a lo catolica, light, sin huevos.

Fernández dijo...

Buena compadre... como dijo alguien por ahí, le achuntaste a la cantidad de goles, jajaj... Me siento plenamente identificado con lo que dices, quizás en mi caso muy arraigado por vivir casi 6 años fuera del país... Mi máximo trofeo, haber ido a los 4 partidos del mundial de 98... después de haber ido a todos los partidos de esa eliminatoria...

Saludos

Cristóbal